Proceso de la elaboración del Turrolate
Calidad, esa es la palabra exacta para definir nuestro producto.
A parte de la almendra, el otro ingrediente principal es el cacao.
El cacao fue el oro más preciado del imperio maya debido a todas sus buenas propiedades. Se obtiene de las semillas que se hallan en las vainas del árbol de cacao; vainas que nacen de una flor parecida a una orquídea salvaje que sale del tronco.
Una vez fermentado, es tostado y triturado. Tiene un sin fin de aportes nutritivos: hidratos de carbono, proteínas, magnesio, fósforo, potasio, cafeína, antioxidantes y hierro entre otros, además destaca por tener un elevado aporte de energía.
Nuestra maquinaria permite crear con estos ingredientes de primera un producto único con una excelente textura y un magnífico aroma que a tantos os encanta.
Después de un largo y delicado proceso de mezclado y prensado de nuestra materia prima en el molino galé, conseguimos la textura deseada en la masa y pasamos a darle la forma tan peculiar que tiene, quedando listos para ser envasados y distribuidos.
Es tradición en nuestra localidad consumir el chocolate de bollo (o turrolate) acompañado de pan con Aceite de Oliva Virgen Extra. Un complemento ideal para nuestro producto de lujo que se conoce popularmente como «Hoyo con aceite».
